EAV (ElektroAcupuntura de Voll)
La EAV (ElectroAcupuntura de Voll) es un método, relativamente reciente, que tuvo sus inicios en los años 50. Desde los tiempos del médico alemán Dr. Voll, quien desarrolló este método, además de la acumulación de innumerables experiencias obtenidas, se han evolucionado en gran medida los aparatos de electroacupuntura y los sistemas de archivo de datos, con lo que se ha convertido en un método de diagnóstico y terapéutico aún más eficaz, más sencillo y sobre todo más rápido de lo anteriormente conocido.
Este método nos posibilita efectuar un diagnóstico a través de mediciones electrofísicas en unos puntos concretos de la acupuntura que suelen encontrarse en las manos, en los pies y en la cabeza. Si ejercemos sobre el organismo una tensión constante de un voltio, podremos medir en el lugar concreto en el que se encuentran los puntos de acupuntura, que la resistencia eléctrica de la piel es menor que en las zonas exentas de puntos de acupuntura.
El valor de resistencia obtenido en cada punto es de gran interés diagnóstico. Estas mediciones se parecen a las efectuadas por un electrocardiograma o electroencefalograma y son indoloras.
Para poder medir esta reacción, nos hacemos servir de unos aparatos sofisticados con los que a través de unos electrodos de medición, medimos la resistencia eléctrica. De los valores obtenidos se deduce el estado energético de los meridianos, por los que fluye el chí. El Qi es la energía vital que abastece a cada uno de nuestros órganos según los estudios milenarios de la acupuntura china.
Si la medición sobrepasa de forma notable el valor de 50 en el instrumento de medición (el valor normoergético que corresponde a 95 kOhmios), el paciente estará afectado por un proceso YANG irritativo o infeccioso (...itis). Si el valor obtenido es notablemente inferior a 50, nos mostrará que el problema del enfermo será un proceso YIN debilitamiento o trastorno degenerativo (...osis). Como vemos este método le sería de gran ayuda a todo ACUPUNTOR para poder realizar un diagnóstico sencillo, rápido y correcto a través de la medición bioeléctrica de los meridianos y sus puntos.
Uno de los tratamientos que se nos ofrecen con la EAV, sería la estimulación eléctrica del acupunto a través de impulsos sedantes o tonificantes. Esta estimulación se aplica directamente mediante la sonda de medición sin necesidad de pinchar con agujas.
Otro aspecto interesante que nos ofrece la EAV es el "Test de medicamentos". Podemos confrontar al paciente con medicamentos, remedios homeopáticos o sustancias, que son incorporados al circuito paciente/aparato, los cuales provocan en el paciente una reacción que podemos medir con los aparatos de EAV. La transmisión de estas informaciones energéticas (vibraciones electromagnéticas) hacia el paciente, ocurre según el principio de la resonancia. La aguja del instrumento de medición (ohmiómetro) nos muestra la reacción del paciente frente al remedio medido. Si los valores medidos en los puntos concretos de la EAV mejoran acercándose al valor fisiológico 50 y/o neutralizando la caída de aguja, entonces habremos encontrado la sustancia o el remedio homeopático idóneo para el paciente. Como vemos también es un método interesante para todo HOMEÓPATA ya que facilita en gran medida la búsqueda del remedio idóneo (simílie) y de la potencia correcta, sin necesidad de ingerir los preparados homeopáticos y esperar a sus efectos.
Por otro lado también podemos testar sustancias homeopáticas que portan la información energética de gérmenes o tejidos patológicos llamados nosodes. De tal forma que, si confrontamos por ejemplo a un paciente tuberculoso con la nosode “ tuberculinum “, éste reaccionará de forma positiva a la información energética transmitida ya que se están estimulando las actividades autoregulativas del paciente según los principios homeopáticos. De tal forma que por un lado se puede comprobar si se ha encontrado el medicamento idóneo para el paciente y por otro lado se puede utilizar, provocando al organismo para diagnosticar una enfermedad. De gran interés para TODO TERAPEUTA (bien sea de medicina convencional o alternativa) que desee realizar un diagnóstico efectivo sin pruebas molestas para el paciente, sin tiempos de espera, sin efectos secundarios y sobre todo para diagnosticar enfermedades crónicas y latentes, difíciles o imposibles de diagnosticar con métodos clásicos.
Otra de las posibilidades que se nos ofrece, es la de medir y diagnosticar si un paciente está afectado por sustancias cargantes para el organismo, como pudieran ser alergenos y sustancias tóxicas a las que el paciente está expuesto día a día y que le afectan en gran medida como por ejemplo, el polen, ácaros, pelos de animales, materiales de construcción, pinturas, tejidos, alimentos y aditivos utilizados por la industria de alimentación, pesticidas, insecticidas, medicamentos, materiales dentales como prótesis o empastes (sobre todo los componentes altamente tóxicos de la “amalgama“), electrosmog y un largo etc. Como vemos, también un método interesante para ALERGÓLOGOS ya que con la EAV podemos diagnosticar, no solamente alergias, sino también intolerancias, sin necesidad de realizar tests molestos y duraderos. Los posibles alergenos son introducidos en el circuito aparato/paciente y la reacción del paciente frente a la información energética de dicha sustancia puede ser medida al instante sin haber confrontado al paciente con los componentes químicos de dicha sustancia con lo que se excluyen reacciones indeseadas.
Con este método también podemos detectar si el paciente está afectado localmente por un campo de alteración, que pudiesen ser infecciones encapsuladas o si el paciente está afectado de forma global por un foco debido a transformaciones de los tejidos por trastornos crónicos o resultado de una intoxicación permanente. En multitud de casos son estos focos y campos de alteración, difíciles de diagnosticar con otros métodos, los que originan o sustentan una patología crónica.
Si no tratamos previamente estos campos de alteración o focos, será prácticamente imposible la curación del paciente.
Queda por decir que es un método de diagnóstico ideal para todo ODONTÓLOGO que se interesa por detectar; intolerancias frente a materiales dentales, focos infecciosos latentes sin que estos se puedan diagnosticar en las radiografías (antes de que el paciente acuda a la consulta con dolores). También podemos medir las corrientes y tensiones endobucales para reconocer procesos galvánicos en la cavidad bucal. Así mismo es un método ideal para reconocer la relación orgánica existente entre los diferentes dientes y sus correspondientes órganos relacionados.
Hasta ahora hemos visto algunas de la posibilidades diagnósticas de este método. Las posibilidades terapéuticas se deducen de las formas diagnósticas por ejemplo a través de terapias energéticas como la homeopatía, los nosodes, la acupuntura, etc.
A través del aparato terapéutico podemos efectuar una terapia de estimulo energético (electroterapia) del meridiano afectado mediante diferentes tipos de impulsos y frecuencias eléctricas. El resultado es el equilibrio energético del meridiano, bien sea sedando o tonificando los acupuntos correspondientes. Es un método idóneo para tratar los acupuntos y meridianos de forma indolora (sin necesidad de pinchar con agujas).
También podemos estimular áreas afectadas del aparato locomotor, como por ejemplo en caso de una epicondilitis, tendinitis, artritis, etc. mediante mínimas corrientes eléctricas (electroterapia) transmitidas por unos electrodos que están en contacto con la parte afectada del organismo. Está demostrado que mediante este procedimiento, los tejidos dañados se regeneran con mayor rapidez. Ideal para FISIOTERAPEUTAS, MASAJISTAS, QUIROPRÁCTICOS, etc
Hay muchos puntos que favorecen la utilización de este método y afortunadamente pocos en contra. La electroacupuntura de Voll es un método basado en serios estudios, practicado internacionalmente desde más de cincuenta años por miles de médicos, es prácticamente indoloro, es limpio, es rápido, es muy indicado para niños, es preventivo (se pueden diagnosticar patologías antes de que se presenten los primeros síntomas) y quizás lo más importante, sin causar los efectos secundarios conocidos de los métodos convencionales.
Indicaciones; las mismas conocidas de la acupuntura y la homeopatía, sobre todo patologías crónicas, autoimunes (alergias, neurodermitis, ...), reumáticas, neurológicas (neuralgias, esclerosis múltiple,...), degenerativas, patologías del aparato locomotor.... y un largo etc.
Contraindicaciones; pacientes portadores de marcapasos y en casos de embarazo.